Todo manejo de crisis lleva consigo las semillas del éxito y las causas del fracaso
La preparación es lamejor estrategia para disminuir riesgos y atender con oportunidad una crisis. En Ventura, gestionamos la comunicación de cualquiersucesoque pongaen riesgo lasoperaciones y viabilidad de una organización, ponemosénfasisenlaidentificación de áreasvulnerables, elaboraciónde programasde prevencióny capacitación, así como planes y políticas de actuación.
A través de un diagnóstico de vulnerabilidades y auditoría de comunicación, trabajamos con las organizaciones en el diseño de programas de manejo de crisis para generar una cultura corporativa de prevención, que ayude a mitigar y resolver cualquier contigencia en tiempo y forma, identificar asuntos vulnerables y realizar acciones correctivas, así como dar respuesta oportuna a emergencias inesperadas que pongan en riesgo la continuidad de las operaciones y ocasionen un daño a la reputación.
Durante la crisis,ayudamos a las organizaciones a diseñar la estrategia de respuesta, a la conformación de equipos de profesionales multidisciplinarios para atender cada aspecto de la emergencia y establecer comunicación permantente con todos los públicos afectados, así como llevar a cabo las acciones de mitigación y contención.
Los entornos en donde se origina una crisis nunca son iguales, la escalación de eventos, su alcance y estragos tampoco. Sin embargo, cada crisis independientemente de su origen, tiene particularidades que deben ser gestionadas a partir de una estrategia que contemple conocimiento de experiencias similares, análisis de la información disponible y mucha creatividad para ofrecer la mejor solución.
Una vez resuelta la emergencia, las organizaciones deben recuperar la normalidad; cumplir con los compromisos públicos y resarcir los daños. La etapa de recuperación es muy importante, ya que en ella se encuentra la semilla de una nueva crisis o una oportunidad para reposicionar con éxito a la organización.
En esta etapa trabajamos con las organizaciones para dar continuidad a las acciones de mitigación y respuesta, hacemos una evaluación para identificar áreas de oportunidad y extraer enseñanzas. De este ejercicio se pueden proponer acciones de mejora, y transformar la crisis en oportunidad. Toda crisis trae consigo una enseñanza, pone al descubierto áreas vulnerables o aspectos de riesgo que la organización no había considerado.
Debido al auge y penetración de las redes sociales en todos los sectores productivos, hay más posibilidades de que las crisis se hagan públicas y las noticias virales, esto promueve la escalación de eventos e incrementa el daño en la reputación de las organizaciones en poco tiempo.
En crisis corporativas, desarrollamos estrategias y planes de respuesta para el manejo de medios sociales, a partir de un diagnóstico, para distinguir una eventualidad (trending topic sin trascedencia e impacto limitado) de una verdadera crisis y actuar en consecuencia. Saber qué hacer en ambos casos y manejar de manera oportuna el ecosistema digital es fundamental para prevenir un daño mayor, y no sobreactuar al calor de un debate estéril sin trascedencia.
Capacitar al equipo directivo en el Manejo de Crisis para establecer un comité que pueda responder oportunamente ante cualquier emergencia que ponga en riesgo las operaciones y la viabilidad de una organización.
TEMARIO:
• Panorama general sobre el Manejo de Crisis en las organizaciones
• Comité de Manejo de Crisis: formación de equipos, roles y responsabilidades
• Sistema Integral: preparación, actuación y recuperación
• Técnicas y procedimientos
• Planes de contingencia
• Flujos de comunicación con públicos clave y políticas de atención
• Medios de comunicación, opinión pública y percepción
• Relaciones Institucionales
DURACIÓN:
8 horas (4 horas teoría-revisión de casos prácticos y 4 horas de simulacro)
En Ventura Comunicaciones tenemos una amplia experiencia en el desarrollo de simulacros en ambientes controlados y seguros.
En una jornada de 8-16 horas somentemos al equipo ejecutivo de una organización a una crisis con el mayor realismo posible para capacitarlos y extraer varias enseñanzas que posteriormente serán formativas en la operación cotidiana.
Un simulacro equivale a confiar, ofrece un espacio donde las personas pueden asumir riesgos, el equipo puede tomar decisiones y llevar acciones correctas o equivocadas. Solo de esa manera es posible descubrir problemas y variantes que no se tenían considerados, se generan nuevas y valiosas ideas con la intención de establecer normas útiles e integrarlas a los protocolos de seguridad y respuesta a una crisis.
Es una excelente oportunidad para formar equipos de alto nivel, poner a prueba las habilidades de sus integrantes y su desempeño frente a situaciones altamente estresantes, además es una oportunidad para fortalecer la cohesión y confianza entre el equipo ya que también promueve un ejercicio grupal de autoconciencia que incentiva el intercambio de puntos de vista, sentimientos y reacciones de las personas que interactúan.
Los simulacros forman parte de los programas de prevención y planes de manejo de crisis de empresas y dependencias públicas preocupadas por la seguridad de sus operaciones y del bienestar y protección de sus públicos clave; se llevan a cabo periódicamente como parte de su cultura corporativa para formar equipos de alto nivel que estén preparados para la atención oportuna de cualquier contingencia que vulnere la viabilidad de una organización.
Las organizaciones que realizan periódicamente este tipo de simulacros ofrecen mayor certeza de reaccionar exitosamente ante una eventualidad, que aquellas que no tienen integrado en su cultura corporativa simulacros en sus protocolos de prevención.